Otra vez la nube genera noticias ciertamente poco positivas y otras vez las noticias, valga la redundancia giran sobre los mismos conceptos aunque, en este caso le ha tocado a Microsoft.

De hecho la caída de la nube del gigante tecnológico no es la primera que contemplamos en los últimos tiempos, de hecho, en buena ley debiéramos hablar de dos caídas en menos de un mes aunque es cierto que la anterior no fue tan grande.

Servicios como el propio Hotmail u Office 365 (entre otros) quedaron fuera de juego dejando a millones de usuarios sin acceso a dichos servicios y con, como poco, una cierra sensación de duda ante la aparente facilidad con la que la nube de Microsoft sufre alteraciones, recordemos en este punto que la caída de Oficce 365, supuesta alternativa de la firma a Google Docs, es la segunda en poco menos de un mes, en aquella ocasión y tras unas tres horas de alteración del servicio el mismo fue restablecido aportando un descuento en la cuota del 25% a los afectados.

Aun no sabemos si se harán descuentos también en esta ocasión o simplemente quedará como otro incidente más de los servicios alojados en la nube.

A estas alturas, y por desgracia, comenzamos a acostumbrarnos precisamente a lo que se mostraba como uno de los dos grandes enemigos del clouding; las caídas masivas de los servicios alojados por las marcas ofertantes, algo que, basta revisar los artículos de los últimos meses, les está ocurriendo prácticamente a todas las firmas.

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